Perdida

Tengo la carne trémula mordiendo ausencias, y se vuelve púrpura mi piel por la escasez de tu agua. El silencio se vuelve fuego y duelo, calcinando mis cosechas, y me como las cenizas esparcidas por no tener besos que llevarme a la boca. Soy isla para un naufrago, con palmeras como perchas donde cuelgo la soledad, tierra sin esquinas, rodeada de un mar congelado que colecciona los ahogados ecos de tu nombre.

Espérame

Espérame...a lo lejos...pero espérame....
No te precipites con el ímpetu de amarme, porque con ello puedes desequilibrar todos mis sentidos.
Aguarda como el cazador espera a su presa, yo llegaré dispuesta a que me atrapes con tus mismas manos y me lleves a mejor vida..que es la de volver a amarte...
Espérame alertado por mis huellas, pues se dibujaran rectas a tu destino, sin mas pretensión que la de quedarse quietas junto a las tuyas para siempre.
Mantente alerta, pues el aire te traerá mi voz que desde lejos grita que te sigo amando desde entonces...desde siempre y para siempre.
Deja que me acerque nuevamente, pero despacio, no es fácil cuando nuestro amor ha dormido placidamente desde hace tiempo, deja que lentamente saboree un nuevo despertar.
Llegaré débil y maniatada por las circunstancias, por todos esos días que sin ti, me han deteriorado el alma, pero sé, que tan solo un beso tuyo, podrá amainar este desasosiego.
Háblame entonces de tus miedos y de tus silencios...solo así podremos ganar y empezar de nuevo, solo así podré amarte aún más... si es que se puede.
Refúgiate en mis brazos cuando llegue...yo estaré cansada, casi sin aliento, pero aún conservo lo que aprendí de ti, escuchar con la mirada....abrazar con mis besos....hablar con mis manos....amar con mi silencio....besar con mi alma...
Ando ligera por el mismo paisaje que me ofreciste en su día, los verdes de la esperanza, los azules de la calma, los ocres de ensueño que invitan a pensarte....grises de la paz...rojos de tus labios....blancos que me adormecen....marrones de tus ojos....plata tus cabellos....y oro, oro... tu corazón.

El amor

El amor es como cuando nace una suave y melodiosa partitura.... Llega a ti en un armonioso día... y dejas que entre en tu mente construyendo las primeras notas, los primeros compases.... y sucede que tus manos desean tocarlo, que de tus labios, brota la muda sensualidad que moldeará tus dedos... sinfonía alegre o Aria melancólica.
Vas oyendo dentro de ti el profundo sonido de la esencia... el compás arrollador que te abduce y te atrapa... y cierras lo ojos...y se eleva el alma...se separa de ti un yo desconocido que vaga por el aire... construyendo un sueño, dibujando el primer ensayo de un beso... o el último concierto de un fracaso.

Tan solo a veces

A veces, cuando tengo un mal día, me pregunto de que estoy hecha...pues me siento como un reloj de arena que contiene tan solo un minuto, o como espantapájaros para este ciego mundo. Me reconozco en ese pozo de café ya gastado, sin aroma, estéril...o en un beso lanzado al aire que sin destino alguno, sacude su dulzura al viento...Me siento como armario para encerrar tan solo el trasto viejo de mi alma, que conservo aún con naftalina para que no muera su esencia.
A veces...cuando tengo un mal día, descubro que estoy hecha de todo desperdicio, de todo lo inservible, como el envoltorio de cualquier regalo que va a parar.. quien sabe a donde! O como nido olvidado después de haber cobijado amor en cada una de sus ramas, me siento como rosa sin espinas, como rana para un príncipe, como luna sin su mar...tan solo soy una gota de lluvia que muere al caer y al azar. Afortunadamente es tan solo a veces...cuando tengo un mal día.

Esas pequeñas cosas

Apreciando las pequeñas cosas he aprendido a observar las grandes cosas, que no es lo mismo que las cosas grandes...
Saber apreciar la esencia de todo es lo que me hace persona, lo que me ata a la vida, lo que hace que mi cuerpo se funda con la madre tierra. Sentir que existen diminutas cosas que comparten mi existencia y son casi inapreciables, hace que me sienta una persona privilegiada, ya que me enamoro de todo porque todo forma parte de mi...
Saber entender el nacer y el morir hace que valore mucho mas todo lo que me rodea mientras puedo, ya que todo, al fin y al cabo, es efímero en el tiempo. Y al contemplar la vida desde ese punto, entiendo que no debo desperdiciar ni un solo momento en cosas materiales, porque de eso no voy a alimentar mi alma, no voy a calmar mi curiosidad ni alcanzar mis sueños, solo sé que si aprendo a amar todo en esta vida...incluso puedo amarte a ti.

La tierra despierta bajo mis pies y atrapa a pasos agigantados la admiración de mi dormida mirada, pues nace la hierba como un tapiz que invita a soñar...tímidamente crecen las primeras hojas, advirtiéndome desde su extremada pequeñez que el árbol que las cobija será el guardián de mis noches, la sombra para mi cansancio y el sereno portador de mi calma.
Los rosales asoman por los rincones regalándome ya su afán por mostrarme sus espinas, protegiéndose así de mis manos asesinas, no saben que los prefiero así! repletos de sus lágrimas, blancas rojas o amarillas.

Tus manos

Busco unas manos que hablen de amor, porque sin ellas, mueren mis caricias, se desvanecen mis actos, se desperdicia mi tacto....
Busco unas manos libres de cualquier pasado, para que escriban en mi piel un aterciopelado presente....
Busco unas manos llenas de vida para que me devuelvan la mía y así recuperar el aliento que un día otras manos me robaron.
Busco manos de hoguera, fuego y cenizas para que cálidamente se evaporen mis lágrimas....
Busco unas manos....que leviten perdidamente por el universo esperando un destino...
Manos que me roben un beso...manos que enreden mi alma...que me sueñen...que me envuelvan de calma...
Tus manos... manos furtivas que secuestren mis sentidos y ahoguen mi llanto nocturno.
Manos que me rocen los sueños, que me agarren la vida, que labren mis desiertos...manos que cubran de rosas mi cuerpo.
Solo busco tus manos....ese todo...ese sublime acto...que es el de observar el despertar de una caricia hasta que muere despacio en algún lugar de mi insignificante ser.

Rosa.

Sin ti